Siempre me ha apasionado la idea de contar historias a través de la imagen, la fotografía para mí es una forma de capturar esos instantes de nuestra propia historia y de alguna forma crean que ese pasado efímero continúa siendo un presente en algún lugar dentro de ti.
Es por ello que decidí estudiar cinematografía y tras terminar mis estudios de Dirección de Fotografía en la Ciudad de la Luz de Alicante me dediqué a las labores de asistente de cámara en cine, publicidad, moda y videoclips.
Un trabajo que compaginé durante diez años con la fotografía de bodas, sobre todo en los inicios, de la mano de Ana Tornero Fotografía. Con ella aprendí muchísimo, en especial el arte de convertir lo ordinario en algo elegante y ensalzar el romanticismo.
Por giros del destino, me encontré a mi misma comenzando de cero en Escocia, nuevo lugar, diferente idioma, cultura y una puerta más a ver el mundo desde otra perspectiva.
Pero cuando la cosa parecía que empezaba a arrancar en mi nuevo hogar una situación global decidió congelar la vida de todo el mundo. Y es que la pandemia ha causado muchos estragos al sector audiovisual y yo que soy un poco inquieta decidí que no me iba a quedar esperando a que todo pasara para disparar.
Así que me propuse crear proyectos personales sin otro fin o propósito que hacer lo que más me gustaba, disfrutándolo al máximo y de la manera que más feliz me hiciera. Sigo muy sorprendida del resultado tan positivo que he tenido ya que gracias a ello, más gente me ha conocido y he empezado a tener trabajos siguiendo la línea que comencé para mi.
Para este proyecto quise crear una historia basada en otros tiempos, donde todo parecía más elegante y romántico. Basándome mucho en el cine de la época de los noventa de la que soy gran fan.
Tuve la grandísima suerte de encontrar, casi por casualidad, a Rebekah C. Chapman.
Una “costume designer” que crea increíbles vestidos basados en la época de 1890s. Ella es pura elegancia y sus dones de arte dramático son más que evidentes.
Con todo esto nos trasladamos al castillo de Lauriston, una casa señorial ubicada en la costa norte de Edimburgo y que ahora pertenece a los museos y galerías de la ciudad.
Sus jardines están abiertos al público desde hace años y es un placer pasear por ellos especialmente durante el otoño.
Sus encargados nos pusieron las cosas muy fáciles y tras unos permisos y organización nos encontramos disparando en su interior donde el tiempo parece haberse detenido.
Y disfrutando de nuestro trabajo es cómo nació nuestro último proyecto: “Victorian Fall”.
Actualmente me encuentro ubicada en Edimburgo, Escocia. Con algunas escapadas a Alicante, donde siempre sentiré mis raíces. Capturando historias ya sean a través de Bodas, reportajes de pareja, momentos familiares o retratos.
Siempre con la idea de mostrar un trocito de nosotros a través del arte.
Victorian Fall
Fotografía: Patricia Garrigós @pgarrigosphoto
Modelo y oufit: Rebekah C. Chapman @ms_dwinter
Ubicación: Lauriston Castle