Por: Elena Compte
Cuando se casa una de tus mejores amigas la alegría es enorme. Sabe que estás ahí para lo que necesite pero hay una parte importante que seguro te va a tocar organizar, y tú encantada: ¡la despedida de soltera!.
Lo mejor es que busques alguna otra amiga cómplice que te eche una mano y os pongáis en marcha. Lo primero, pensar o decidir los detalles básicos: cuántas vais a ser, si os conocéis todas o no, si la despedida durará un fin de semana entero o si lo tendréis que concentrar en una sola noche, las fechas…
Cuando tengáis algunos de estos detalles claros hay que ponerse a pensar lo que le gusta a la novia, que a fin de cuentas es la protagonista y a ser posible que sea algo especial para ella. ¿Le va la marcha y siempre ha querido ir a un boys? ¿está muy estresada y lo que va a disfrutar es ir a un spa con sus amigas? ¿disfruta de la naturaleza y un fin de semana en una casa rural todas juntas le va a encantar?.
Ahora hay muchísimas actividades que se reservan en privado para grupos y que se adaptan a todos los gustos: una clase de pool dance o de cocina afrodisíaca, una sesión privada para ponerse guapas en plan beauty party o de shopping…
En cualquier caso, incluso si te decantas por un plan más clásico, como ir a cenar y luego salir de copas, es importante preparar algo personalizado para sea una velada inolvidable para la novia.
Puede ser un álbum de fotos de los grandes momentos que ha vivido con las distintas amigas (seguro que el resto de amigas colaboran encantadas), podéis hacer camisetas divertidas con la cara de la novia para todas, prepararle una gymcana por los lugares que han sido importantes en su vida si estáis en su ciudad de origen y que vaya de un sitio a otro adivinando pistas o grabar un vídeo divertido en el que cada amiga cuente alguna anécdota graciosa que compartieron, cómo se conocieron o qué os une a la novia.
Hay muchísimas opciones adaptadas a todos los presupuestos y lo más importante será ir cargadas de buen rollo, así que ¡sólo hay que pensar!.